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Fútbol Más refuerza su compromiso con la infancia vulnerable a través del deporte
El pasado 7 de febrero, Aitor Hernández Sánchez, director ejecutivo de Fútbol Más España, sostuvo un encuentro con Patricia Bárcena, adjunta segunda del Defensor del Pueblo, y Elena Arce, directora del área de Migraciones e Igualdad de Trato. En el encuentro, se trataron temas relativos al acceso al deporte sin discriminación, con especial atención en la infancia en contextos de riesgo social y menores migrantes.
Durante la reunión, Fútbol Más presentó los avances y resultados de su proyecto en España, así como su preocupación ante la falta de espacios seguros para el juego y la práctica deportiva, especialmente para niños, niñas y jóvenes migrantes o en situación de movilidad.
El Defensor del Pueblo, en su compromiso por la protección de los derechos de la infancia vulnerable, ha reiterado la importancia de garantizar entornos seguros y accesibles para el desarrollo de la niñez. En su último informe anual, la institución dio cuenta de un aumento general del índice de riesgo de pobreza o exclusión social en España –AROPE por sus siglas en inglés– y resulta especialmente preocupante que el aumento es mayor respecto de menores de 16 años.
Otra de las preocupaciones planteadas por la entidad, tiene relación con menores migrantes que llegan a España debiendo enfrentar barreras para la integración. En este sentido, una de las recomendaciones de la institución es garantizar espacios seguros para la infancia en movilidad y facilitar la integración de menores migrantes en el sistema educativo y en programas de ocio y deporte, elementos que son parte de los ejes fundamentales en el trabajo de Fútbol Más alrededor del mundo.

Desde Fútbol Más, creemos firmemente que el deporte puede transformar realidades. Nuestra labor se enfoca en generar oportunidades para la infancia y juventud en contextos de vulnerabilidad, brindando un espacio donde el juego y la actividad deportiva sean sinónimo de inclusión, desarrollo y bienestar.
La reunión significa un paso adelante en el trabajo colaborativo con diversas entidades que protegen los derechos de la infancia para consolidar el deporte como un motor de cambio y justicia social.