Cada 25 de noviembre recordamos que la violencia contra mujeres sigue siendo una realidad global. Según Naciones Unidas, 1 de cada 3 mujeres ha sufrido violencia física o sexual alguna vez en su vida, y la violencia psicológica sigue siendo la forma más frecuente y más silenciada. 

En España, los avances son significativos, cada vez más mujeres denuncian, más casos se visibilizan y más recursos existen, pero los datos muestran que todavía queda camino: más del 40% de las jóvenes afirma haber vivido algún tipo de violencia de control. 

En este contexto, el deporte emerge como un espacio de protección, empoderamiento y transformación. No solo por los beneficios físicos y emocionales que aporta, sino porque ofrece estructuras comunitarias que pueden prevenir, detectar y actuar frente a cualquier forma de violencia. 

Violencia y deporte: una realidad que también debe abordarse 

Las organizaciones internacionales advierten que los entornos deportivos no están exentos de violencia de género ni de violencia hacia la infancia. Comentarios sexistas normalizados, exclusión, falta de referentes femeninos, relaciones de poder y casos de abuso o acoso evidencian la urgencia de reforzar medidas de prevención. 

Además, la infancia y adolescencia deportista es un colectivo vulnerable a la violencia en su concepto amplio (UNICEF, 2019), según el proyecto CASES (Hartill et al, 2021), en España las experiencias de violencia dentro del deporte infanto juvenil ascienden al 78%. 

Pero también hay datos esperanzadores: 

• Cada vez más federaciones y clubes están incorporando protocolos de protección. 

• El aumento de programas coeducativos ha reducido conductas violentas en entornos deportivos escolares. 

• El crecimiento del deporte femenino está generando nuevos espacios seguros, liderados por mujeres, donde niñas y adolescentes pueden participar sin miedo ni estereotipos. 

Más que Campeonas: creando entornos seguros para la infancia y fomentando una nueva cultura del deporte 

En el marco de la iniciativa Legacy for the Future, el proyecto Más que Campeonas está impulsado por UEFA Foundation for Children y adidas Foundation e implementado por Fundación Fútbol Más España con el apoyo de la RFEF; y de la Junta de Andalucía y el IMD en Sevilla, donde también implementa la Fundación del Real Betis Balompié. Juntos, trabajamos para que el deporte sea un refugio seguro para niñas y adolescentes, especialmente en contextos vulnerables. 

El programa se fundamenta en tres pilares esenciales: 

• Acceso seguro al deporte: crear espacios libres de violencia física, verbal y simbólica. 

• Educación socioemocional: trabajar la autoestima, el respeto y las relaciones sanas dentro y fuera del campo. 

• Referentes femeninas: porque ver a mujeres liderando, jugando y disfrutando del deporte reduce estereotipos y genera entornos más igualitarios. 

Un compromiso que empieza por la comunidad 

La violencia contra mujeres y niñas no se combate solo con leyes; se combate también en los patios, en los vestuarios, en los entrenamientos y en cada espacio donde los niños y niñas se desarrollan. Por eso, este 25 de noviembre recordamos que proteger a la infancia es prevenir la violencia del futuro. 

Desde Fútbol Más reafirmamos nuestro compromiso para seguir construyendo espacios donde las niñas puedan sentirse seguras, acompañadas y libres.